Es increíble lo mucho que se ha recorrido en este planeta. Soy un ciudadano del mundo, caraqueño de nacimiento, hijo de una familia de 4 hermanos (cada uno con su singularidad), seguidor del equipo de béisbol profesional del Magallanes, muy extrovertido y claro en la palabra, sin miedo a escuchar otras opiniones y convencido del crecimiento personal. Nací en Catía, una zona al oeste de Caracas, donde fui muy feliz en sus calles. Mi cerro Ávila no deja de estar en mi mente. Me gradué en Humanidades en el Liceo Miguel Antonio Caro y estudié artes escénicas, desarrollando el gusto por las artes. Soy un profesional en administración y gastronomía internacional.
Desde mi mayoría de edad, mi desarrollo profesional ha sido en salas de teatro, restaurantes y empresas comerciales. Antes de salir de Venezuela para recorrer varios países de mi interés como España y Reino Unido, trabajaba en el departamento comercial del diario El Nacional, que se convirtió en mi escuela comercial. .
En el año 2008, decidí viajar como turista a Ecuador, ansioso por descubrir sus historias y su gente. La gastronomía, los volcanes y los paisajes de ensueño, que son muy similares a los de mi querida Venezuela, cautivaron mi atención. En este viaje, hasta me encontré con antiguas amistades ecuatorianas que antes vivieron en mi país. Luego de 24 hermosos días disfrutando de Ecuador, volví a Caracas a continuar en mi cargo en el periódico. Al cabo de un tiempo, recibí la oferta de una oportunidad laboral en Quito. Pensando los pro y contras, decidí que en 4 meses me radicaría en la luz de América. Fue un 21 de agosto que arribé al antiguo aeropuerto de Quito, con maletas cargadas de sueños y ganas de radicarme en Ecuador.
Desde un principio me gustó tener que adaptar mi cultura a la forma de ser de los quiteños, aprendiendo sus modismos, conociendo sus calles y fiestas. Mi miedo era cómo encajar en una tierra desconocida. Asistía a reuniones con nuevas amistades, todas nacionales, y solo como oyente fui adoptando las herramientas necesarias para este largo camino de ya casi 10 años.
Hoy en día, Quito es mi ciudad de residencia, es mi fuente de mi día a día y me siento parte de ella. Me considero un ecuatoriano adoptado por su bella historia ancestral. Muy pronto optaré por la nacionalidad y así seguiré cumpliendo mis pasos y afianzando mis raíces junto a grandes amistades de diferentes provincias del Ecuador, cosechadas por años de compartir. No olvido mis orígenes en Venezuela. De hecho, Venezuela es mi base primordial y anhelo poder ir más seguido. Sentir esa nostalgia por mi Caracas, me da el coraje para seguir logrando éxitos en mi Quito.
En Ecuador, me he desarrollado en mis diferentes áreas y he aportado mis conocimientos en restaurantes, eventos y empresas comerciales que me han brindado su apoyo. Desde hace unos 4 años y algo he dedicado mi tiempo al trabajo social sin fines de lucro, apoyando a personas nacionales o extranjeras en situación vulnerable. Soy el presidente de la Asociación Civil Venezuela en Ecuador AC (www.venezuelaenecuador.com) y junto a un gran equipo de profesionales, hacemos realidad el brindar orientación y ayuda al más necesitado sin distinción de nacionalidad o credo.
Finalmente, puedo decir que soy parte de esta sociedad ecuatoriana que lucha, opina y trabaja para un fin común. Busco ser mejor ciudadano y crear lazos de hermandad entre mis dos tierras.
Daniel Regalado es mi nombre y es un gusto compartir mis vivencias y anécdotas.